La diferencia entre una crema hidratante y una crema nutritiva
Las cremas faciales nutritivas ayudan a cuidar de tu belleza. Aunque la hidratación de la piel es esencial, la nutrición es igual de importante, ya que proporciona un aporte adicional de nutrientes para ayudar a la piel a combatir las agresiones externas. En este caso, el uso de una crema nutritiva es esencial.
Todos los tipos de piel necesitan ser hidratados a diario. La piel deshidratada, que ha agotado sus recursos hídricos, se vuelve tirante e incómoda. En este caso, la aplicación diaria de una buena crema hidratante es esencial.
Sin embargo, algunos tipos de pieles también requieren cuidados nutritivos para calmarlas y evitar cualquier sensación de malestar. Esto afecta principalmente a las pieles secas.
Este tipos de piel ya no segrega suficientes lípidos para formar una barrera protectora. Por lo tanto, es vital proporcionar a la piel los compuestos que necesita para equilibrar esta carencia.
La solución es utilizar una crema facial nutritiva. En Farmacia Blesa contamos con certificado ISO, y hemos seleccionado las mejores cremas para ti. Este tipo de cuidado está formulado a partir de ingredientes activos, que son a la vez reponedores de lípidos e hidratantes. Permite nutrir y rehidratar la piel en profundidad, devolviéndole su flexibilidad, pero también reduciendo la sensación de tirantez. Esta última es una fuente de molestias, que la simple hidratación no suele aliviar a largo plazo.
Los beneficios de una crema nutritiva
Gracias a sus ingredientes hidratantes y reconstituyentes de lípidos, una crema facial nutritiva mantiene y preserva la película hidrolipídica naturalmente presente en la piel. Esta película actúa como barrera para proteger la piel de las agresiones externas. La capa protectora impide la evaporación acelerada del agua.
Si la secreción de lípidos es baja, la piel deja escapar fácilmente el agua, lo que provoca deshidratación y sequedad. María Blesa del Hoyo explica que la crema nutritiva aporta a la piel los lípidos y emolientes que necesita para reparar o preservar su barrera protectora. Como resultado, la piel está mejor hidratada, flexible y protegida contra las agresiones externas.
Nutrir la piel significa proporcionarle lípidos (grasa). Es sobre todo la piel seca la que necesita ser nutrida, ya que no segrega suficientes lípidos para formar una barrera cutánea protectora. Los lípidos ayudan a mantener las células de la piel del rostro unidas. Por lo tanto, es esencial aplicar una crema, o un aceite nutritivo, todos los días, para compensar esta carencia.
Para mantener la flexibilidad de la piel y luchar contra la aparición de síntomas de deshidratación (líneas e irritaciones cutáneas), puedes elegir una crema nutritiva a base de ácido hialurónico, vitaminas y otros ingredientes naturales. Sus principios activos nutren e hidratan la piel:
El ácido hialurónico es conocido por sus propiedades hidratantes. Una ingesta diaria de esta molécula ayuda a remediar la disminución de su producción por el organismo. Suaviza y tonifica la piel.
Las cremas faciales nutritivas se utilizan por la mañana y por la noche, después del sérum habitual. Debes tomar una pequeña cantidad y aplicarla sobre la piel limpia y seca, masajeando con movimientos circulares hasta que la crema haya penetrado completamente en la piel. Con su aplicación, la piel no se estira, deja de ser propensa a las rojeces y recupera poco a poco su tez natural.
