¿Cómo cuidar tus lentillas?
Sin importar la marca, fórmula o especificaciones de las lentillas que estés usando, los cuidados que debes aplicar son siempre los mismos, siendo la aplicación de líquido para lentillas uno de los pasos más importantes en su mantenimiento.
Aunque también puedes encontrar múltiples marcas con diferentes propiedades de líquido de lentillas, la mayoría coincide en su composición, ya que tienen como fin lograr la desinfección y conservación de los lentes de contacto.
Este líquido normalmente es una mezcla de químicos con diferentes propiedades como: conservantes, desinfectantes, humectantes y refrescantes. Esta combinación permite que las lentillas se mantengan en buen estado, no resequen ni rasguen la superficie ocular y, sobre todo, evita que en las lentillas crezcan microorganismos que puedan afectar nuestros ojos.
Asimismo, las propiedades del líquido de lentillas hacen que, una vez colocadas sobre los ojos, estas puedan permanecer hidratadas y húmedas para que no generen molestias. Por todos estos motivos, es recomendable guardar las lentillas en este tipo de líquido mientras no se estén usando y aplicarlo cada vez que consideremos que sea necesario refrescar nuestras lentes de contacto.
Mientras que, en el caso de las lentillas desechables, es útil tener cerca líquido de lentillas para poder limpiarlas en caso de que se ensucien o se resequen.
¿Cómo elegir el líquido de lentillas adecuado?
Es importante contar con un líquido de lentillas de confianza para el cuidado e higienización de tus productos. Sin embargo, entre tantas opciones que puedes encontrar en tiendas y en línea, ¿cómo saber qué tipo de líquido considerar para nuestro consumo?
- Solución única: en la actualidad, el tipo de líquido más utilizado para lentillas, es la solución única. Se trata de un líquido multiuso que en un solo producto permite desinfectar, limpiar e hidratar los lentes de contacto. Con la solución única, no será necesario comprar ningún otro tipo de producto para cuidar tus lentillas, por lo que la rutina de aplicación y cuidado de las mismas, será mucho más sencillo y rápido. La manera correcta de utilizar la solución única es, una vez te hayas quitado las lentillas, sumergirlas en un recipiente especial con un poco de líquido, frotarlas y dejarlas allí durante aproximadamente 6 horas, hasta que sea momento de volverlas a usar. Se recomienda su uso especialmente en lentillas blandas.
- Soluciones para lentillas rígidas: este líquido está especialmente diseñado para ser utilizado en lentillas rígidas, ya que requieren un tipo de mantenimiento diferente. En este caso, no se trata de una solución única sino de un pack de con un producto limpiador y otro acondicionador. Su aplicación se realiza de igual manera al momento de quitarse los lentes de contacto. El primer paso es aplicar el limpiador o desinfectante y frotar por unos segundos. Posteriormente, se lavan las lentillas con solución salina y finalmente, podrás dejarlas reposar en el líquido acondicionador hasta el siguiente día.
- Líquido de lentillas con peróxido de hidrógeno: si deseas conseguir un producto con una mayor capacidad desinfectante, la opción ideal es una solución con peróxido de hidrógeno. Otra de las ventajas de este producto es que es hipoalergénico, ideal para las personas sensibles. Sin embargo, lo mejor es que consultes con tu oftalmólogo si puedes utilizar este tipo de solución, ya que también es de uso delicado.
¿Ya sabes cuál es el líquido más adecuado para ti? Te invitamos a consultar las propiedades de nuestros productos y llevarte el que más se adapte a tus necesidades.
